14 de enero de 2009

Cuando pierdes lo que tenías, es cuando aprendes a valorarlo.

El viento, perfecto e incómodo.
El punto de marea, malo.
La pared, tendida y corta.
El frio, constante.
La playa, desértica y preciosa.
¿Hay baño o no hay baño?
Cuando podía ir a la playa siete días cada semana. No dudaba. Lo que hay no compensa. Me eché ayer y me puedo echar mañana. Hoy lo más cerca del agua, en la arena.
Hoy en día tampoco dudo, tengo que hacer números para ir tres días de siete que tiene la semana al agua. No me quejo compañeros, se que para muchos sería un lujo. Un lujo que hay que aprovecharlo...me ha podido la presión y esta semana he dormido un poco menos para conseguir que en vez de tres sean cuatro. "Por mi y por mis compañeros", me voy al agua.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Eso es Néstor! Vete unas cuantas veces al mar por mi que creo que pasaré una temporadilla sin ir... Venga, que vaya bien y actualiza cuando puedas que así puedo surfear mentalmente y a distancia. Chao.

Anónimo dijo...

si sr. que con estos maretones no hay quien pille por esta zona...haber los findes en casa...

Néstor dijo...

Cuando nos peguemos un baño los tres, tenemos que aprovechar para hacer una comida y una cena. Para aprovechar bién que coincidimos jeje.
Saludos

Anónimo dijo...

pues casi aquel día en esmelle...pero lo cambiamos por akella ola perfecta en doni...

Anónimo dijo...

Lo que hacen las adicciones...eso en un chico tan modosito como tu, docente...jeje. Chamamonos que teño que pasarte uns videos novos e quero recuperar as minhas revistas.

Saudos de Pabolinho from the job

Néstor dijo...

Kiko: Te quejarás de la ola esa, con la de brazo que hicimos.
Pablo: Menos mal que me surtes tu a videos , porque sino iba a ser un inculto del tema. Que iba a ser de mi sin haber visto Sprout, Shelter y cosas por el estilo!! jejejje
Saudos