El pasado sábado 11 de julio tuve la oportunidad de acercarme hasta el Orzán para ver algunas de las tablas que Rufino construyó en los setenta, cuando no era posible conseguir una tabla de surf en Galicia.
Finalmente la organización del evento reunió un grupito de tablas curioso. Aunque todas habían sido hechas a mano por Rufino, destacaría que todas ellas eran muy diferentes entre si (unas muy planas, otras con mucho rocker, de una quilla, de dos).
El único nexo en común entre las tablas era un extra de volumen que tenían todas si las comparamos con las tablas actuales.
Rufino se animó a responder muchas de nuestras curiosidades sobre la forma y procedimientos para fabricar las tablas en aquella época, cuando los conocimientos y la información disponibles eran practicamente nulos.
Las tablas reunidas eran suficientes y como había olas en la playa de Sabón, la organización decidió desplazarse hasta allí para probar aquellas joyas. Decisión que fue todo un acierto.
En Sabón había unas olas divertidas y disfrutamos mucho en el agua surfeando con los diferentes modelos de tablas. Salimos contentos del agua, seguramente la buena mano de Rufino y el extra de volumen de las tablas fueron los culpables de nuestra felicidad.
Para finalizar el día se proyectaron las películas "La primera ola" y "El hijo del pescador" en la cúpula de Matadero, un lugar espectacular para la proyección.
Enhorabuena a la organización Surf Club Lobos de Mar y Pure Company por el evento. Gracias a todos aquellos que prestaron sus tablas de forma altruista.
Foto: Año 2015, sentados en el Orzán y viajando en el tiempo con imágenes de surfistas en esa misma playa en los años setenta, todo un lujo.
Para los que no tuvisteis la oportunidad de acercaros, el evento se repetirá en 2017 y las películas se proyectan nuevamente el 15 de agosto en Valdoviño con motivo de la
2ª Edición Cine Praia de Pantín.
Foto: Hay días que Ferrol está bonito de verdad.