26 de junio de 2018

El arte de shapear.



1

Darle forma a un trozo de espuma donde cada pasada que haces no tiene vuelta atrás. Un trabajo arriesgado ya de por sí el que hacen en TomaGoma.

Fotógrafo: Pablo Nordeslizamento.
2

Fotógrafo: Pablo Nordeslizamento.
3

Pero mucho más arriesgado si la persona que te pide la tabla tiene múltiples manías.

  • Gordo pero fino.
  • Con mucha curvatura pero planito.

Frases que para la mayoría serían contradictorias pero que en TomaGoma saben darles sentido.

  •   Volumen en el medio y cantos finos para que entren fácilmente en la superficie de la ola y vaya el tablón bien metido en la pared cuando ésta se pone vertical.
Fotógrafo: Remi Berthet
8

  • Tabla mayormente plana con una curva bastante marcada en la cola para que la presión que ejerce el agua sobre esta cola, produzca un efecto palanca para compensar el peso del surfista en la punta.
Fotógrafa: Cristina Montero.
10
Toma Goma, fabricando máquinas de sacar sonrisas. La visita a su taller en Valdoviño es obligada si te gusta ver el proceso de fabricación de una tabla de surf. Tambien podeis ver su trabajo en Drop In surf shop, Ferrol.
5

18 de junio de 2018

Como siempre.


Un día soleado con una brisa suave de componente norte. Podría decirse que un típico domingo del mes de junio, pero ayer no era un domingo cualquiera.

0

17/06/2018 y se cumplían diez años del derribo de la antigua caseta de socorrismo. Diez años ya…como pasa el tiempo.

Foto realizada el 03/08/2003.
 1

El 17/06/2008 la policía fue la primera en llegar, desalojar y  dar paso a las máquinas que en pocos minutos hicieron su trabajo.

Fotografías tomadas el día 17/06/2008

4

 3

5

A partir de aquel momento la caseta pasaría a formar parte sólo del recuerdo.

6

La realidad es que a día de hoy pensándolo en frio  la situación tampoco ha mejorado mucho.

La antigua caseta de socorrismo fue sustituida por un módulo formado por varias casetas enlazadas entre sí. Por falta de previsión, cuidados y mantenimientos este módulo se encuentra en unas condiciones nefastas actualmente y es prácticamente inservible más allá del uso como almacén.

7

En la actualidad se ha colocado una nueva caseta en el mismo lugar donde se encontraba la antigua, pero esta nueva caseta es de reducidas dimensiones comparada con la anterior.

8

Para completarla se sitúan en el parking dos casetas más.
9

A mayores existe otra caseta donde se ubican los baños. Unos metros más allá y cerca del parque infantil, otro par de casetas con baños.
Me imagino que con la llegada del verano añadiremos alguna más, para material de surf, escuelas, etc.

Todo han sido soluciones chapuceras, que parecen pequeños parches para solventar la situación que se presenta cada verano sin que se realice un proyecto serio.

En ese momento terminaba de masticar el bocata. Pedro pasaba por delante de mí, llegaba a la playa, “opa Pedro!!!!”. Al verle pasar me vino un flash.

Pedro llegando a la playa, foto tomada en el verano del año 2003, como siempre.
2

Realmente, la situación no ha cambiado tanto o por lo menos no ha mejorado mucho. Quizás todo siga como antes o incluso peor.

Metí el último trozo de bocata en la boca y me incorporé. En ese momento ocurrió una aparición inesperada. La antigua caseta apareció ante mí, allí estaba.

No fue una aparición divina, era real. La antigua caseta diez años después de su muerte todavía sigue con nosotros.

El ladrillo, el hormigón y demás restos del derribo siguen formando parte de la playa y de las dunas.

10

La caseta vive.

 11

14 de junio de 2018

Marruecos, personajes. Parte 4.


En el surf  no debes de meterte donde no te llaman.

Es  importante saber buscar un lugar en el mar acertado para tu nivel, para tu estado de forma y para tu técnica. No te guíes por los demás, no sigas al borreguismo y busca tu sitio.

9

Al principio resulta bastante difícil saber cual es tu sitio. La constancia y la paciencia son dos profesoras que te ayudarán a encontrarlo. Sin ellas, desistirás antes de llegar a conocer nada de este deporte. 

8

Y así fue como se cruzó Daniel en este viaje, picando una ola tras otra sin conseguir atravesar la zona de la rompiente. 

4

Remando sin parar a pesar de retroceder con cada espuma más metros de los que había avanzado remando.
Más de media hora picando una ola tras otra, la constancia.
Conseguía avanzar dos metros y retrocecía tres, pero no se desesperó. La paciencia.

Siguió remando y al final encontró ese sitio. Su sitio. Ese lugar que todos buscamos. Donde poder jugar, estar seguro y divertirse al mismo tiempo. 

6

Una vez allí no trató de seguir a los demás surfistas, ni de entorpecerlos. Tampoco trató de coger todas las olas que pasaban por su lado, simplemente esperó con paciencia  a que llegase la suya. Daniel el alemán, que gran surfista!!

7